miércoles, 13 de febrero de 2013

Recuerdos de Aysén

No importaba el calor, ni el cansancio de un largo día de trabajo, no importaba tampoco la amenaza de no permitir la manifestación porque "el permiso se había pedido con menos de 48 horas de anticipación" ¡qué mierda importa! no serán 48 horas que Teófilo estará sin su normal visión, será el resto de su vida. 
 
Los oficinistas miraban flemáticos, otros con la mirada confusa de quien entrega su vida al profit de otros, había casi más policía que gente, 300 lucas les vale su dignidad, la de nosotros no tiene precio, tampoco fronteras, estaba con nosotros Andrea Pérez, la chica de Valencia que se recupera de la cobarde agresión de la policía borbona, también Patricia Heras y Matías Catrileo, y toda esa infinidad de almas que han dado su vida por la poca libertad que hoy tenemos. 

Con el espíritu de Grecia nuestras gargantas gritaron, con la valentía del pueblo patagón nos tomamos la alameda una vez más, los gases estaban más fuerte que nunca, también nuestra rabia contra la crueldad de quienes hablan de diálogo con el pueblo de Aysén, mientras por las sombras preparaban la cobarde agresión, la FACh en un Hércules aterrizó a las fuerzas especiales de carabineros, defensoras acérrimas del modelo de Friedman, con las tristes consecuencias que hoy conocemos, sobre todo para Teófilo y su familia.

Nuestros miedos denunciados tristemente se hicieron realidad, la represión en Aysén ha sido y es sin tregua, con matices la historia se repite una y otra vez, siempre son los mismos quienes pierden la vida o resultan heridos ante la brutalidad de quien tiene el monopolio de la violencia y no es capaz de buscar salidas justas a los conflictos, porque tienen el alma envenenada con la hipocresía vaticana y por el cruel prejuicio a todo lo que sea diferente a las doctrinas que aprenden con las becas de Chicago.

Pero la respuesta del pueblo organizado lejos de amilanarse, nace revitalizada, Santiago hoy ha dejado claro que ninguna agresión será sin respuesta, las manifestaciones por la Patagonia se multiplican, también las barricadas y la camaradería revolucionaria, la rebelión de Río Gallegos está de vuelta 91 años después.

A esta hora son pocas las personas que caminan por el centro de Santiago, pero el fuego de las barricadas patagonas nos llenan de fuerza, esta noche podremos dormir al menos un poco más tranquilos, porque Teófilo sabe que no está solo en esta guerra, como anarquistas no le pedimos soluciones al gobierno, pero no dejaremos solo al pueblo en esta lucha, porque el pueblo somos todos, tu problema es nuestro problema y tu rebeldía nuestra motivación para seguir viviendo, en este mundo de mierda.



Santiago, Lunes 20 de Febrero de 2012


  
 



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